¿Alguna vez has estado inconforme con tu apariencia física? O tal vez, como yo, has estado inconforme con tu personalidad?
Para escribir este blog tomé partes del libro: "Calm my anxious heart" de Linda Dillow.
Desde pequeña he tenido pensamientos de inconformidad con mi personalidad. Soy muy callada y tengo problemas para hacer amistades nuevas. Cuando tengo la oportunidad de entablar platica con alguien no encuentro un tema que platicar. Cuando la persona ya no está, pienso, debí haberle hablado de esto o aquello. Así mismo, he tenido pensamientos de inconformidad acerca de mi apariencia física.
Vallamos a Salmos 139:13 "Tu creaste mis entrañas, me formaste en el vientre de mi madre." En hebreo, 'entrañas' significa el asiento de los deseos y anhelos, la personalidad. El Señor no solo creó nuestro cuerpo sino también nuestra composición emocional, nuestra personalidad.
Si estamos disgustados con nuestra forma física, realmente estamos discutiendo con Dios. Él es el responsable del color de nuestro cabello y del tamaño de nuestra nariz y hasta si tenemos celulitis.
Los medios de comunicación constantemente nos bombardean con la presión de tener un cuerpo perfecto. Este énfasis es incorrecto y anti bíblico. Como mujeres cristianas, sabemos que esta perspectiva es retorcida, pero qué fácil es quedar atrapada en la enfermedad mortal de la comparación.
Cuando nos comparamos con los demás, se nos dice que somos personas sin entendimiento (2 Corintios 10:12)
Un famoso escritor escribió: "Preferiría ser lo que Dios eligió hacerme, que ser la criatura más gloriosa que pudiera imaginar, porque haber nacido en el pensamiento de Dios y luego hecho por Dios, es lo más querido, más grande y más valioso."
"Tus ojos vieron mi cuerpo en gestación, todo estaba ya escrito en tu libro, todos mis días se estaban diseñando, aunque no existía uno solo de ellos" Salmo 139:16. Quien eres no es un accidente biológico. Lo que eres no es un accidente circunstancial. Dios planeó ambos para ti.
Quizás quieras estar contenta con tu cuerpo o personalidad, pero escuchas las voces que dicen: Se exitosa. Se popular. Se hermosa. Se perfecta. Mi querida amiga, deja de escuchar esas voces. Escucha la voz de Dios. "¿No es él tu padre, tu creador, quien te hizo y te formó?" Deuteronomio 32:6
Ora para que Dios te permita ver la sabiduría detrás de la forma en que te formuló. Si cedes a su arte, el carácter de Cristo se reflejará en la imagen de tu vida.
¿Por qué son alabados los hombres y mujeres en las Escrituras? Por su carácter interno. "Una mujer bondadosa alcanza honor." Proverbios 11:16 No una mujer bonita o una mujer inteligente, sino una mujer de gracia.
Pedro enfatizó esta belleza interior cuando describió lo que es importante para Dios: "No se preocupen por la belleza exterior que depende de joyas, ropa hermosa o el arreglo del cabello. Sed hermosos por dentro, en vuestros corazones, con el encanto duradero de un espíritu apacible que es tan precioso para Dios" 1 Pedro 3:3-4
Tampoco vamos a caer en el descuido. Debemos arreglarnos para nuestro esposo. Pero siempre recordando que:
El carácter interior de una mujer es su adorno.
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